Estamos en la intimidad de un joven latino de 21 años que está descubriendo los placeres del sexo anal. Es la primera vez que prueba un consolador, y el joven necesita sentirse bien por dentro. Nunca antes le había penetrado una polla de verdad. Vive en una zona donde no hay mucha gente y su familia no sabe nada del tema. El pobre joven necesita aliviarse solo y consolarse con juguetes eróticos. Esta mega polla en un caouchou le da tanto placer que ahora se siente obligado a usarla al menos una vez a la semana. Esperando que un papi viril y poderoso venga a cogerle el culo a su jovencito y le enseñe lo que es una buena polla de verdad.